Miguel Alarcón. Futura atentada de ordenación de un hilarante camba nazi

La noticia está confirmada por fuentes conclavistas cercanas a Julio Aonzo. Antes de que termine el año y violando todas las normas eclesiásticas y racionales se procederá a la atentada de ordenación a Miguel Alarcón. El comentarista Enrique, se tomó el trabajo de realizar un importante dossier en PDF, con fotografías públicas de este rocambolesco personaje, que, entre otras cosas posee la increíble preparación teológica como pinchadiscos y milita en un partido nazi… sí, un camba nazi.

Miguel Alarcón trata de tapar los símbolos nazis en sus publicaciones,

La atentada de ordenación será realizada por Julio Aonzo, personaje bien conocido en los medios tradicionalistas y que tuvo su primavera en la segunda mitad de las décadas de 1980 y parte de 1990 cuando regenteaba un “convento” franciscano en Mercedes, Buenos Aires. Luego de haberse escapado con una mujer y pasar varios años en las sombras, comenzó a realizar un nuevo proselitismo con la intención de regresar, por supuesto, por la puerta grande. En efecto ¿Cómo un soberbio y pedante como Julio Aonzo podría pasar desapercibido y quedar como un simple seglar y penitente?

Luego de convencer al rocambolesco y senil Gary Alarcón Zegada, y tras aislarlo a él y al impresentable de su nieto de otros conclavistas, se hizo ordenar y consagrar obispo por segunda vez.

Fueron varias las publicaciones que Miguel Alarcón dedicó, en la página de Facebook del brazo religioso de su agrupación subversiva y neo-nazi a este sitio, y por supuesto a mi persona. En una del 19 de febrero de 2021 se refiere a mi persona como un “traumadito” y “un pobre mediocre sin sentido en su vida que como es frustrado en todo lo que hace, intenta sentirse alguien atacando a las personas dignas”. No sé a qué trauma se refiere él. Es cierto que tuve un par de accidentes en mi vida (dos fracturas de la pierna y una del brazo derecho, con años de diferencia) lo cual hablaría de mi torpeza, pero si se refiere a traumas psicológicos no los creo tener. Sobre las frustraciones en todo lo que hago, es un grave error. Tengo una vida normal y no puedo decir que me va mal. Soy un académico y tengo dos post-grados, uno en mi país y otro en USA, de por cierto en una de las mejores universidades del mundo. Soy profesor universitario, mis artículos se han publicado en revistas académicas, tuve la oportunidad de estar en congresos internacionales y de hecho trabajo en dos universidades en los Estados Unidos, donde resido. Llevo una vida ordenada, a diferencia de Miguel no soy ni un alcohólico ni un pendenciero, tampoco pretendo que me «ordenen» estando casado por civil, habiendo abandonado a mi esposa e hijo o corretear mujeres con las cuales sacarme fotos y publicarlas en Facebook.

A diferencia de él, tengo un trabajo normal y verdadero. A diferencia de él, que es un pinchadiscos y eso lo hace creer “músico”, sé tocar un instrumento musical (estudié violín desde los cinco años). A diferencia de él que apenas sabe escribir con coherencia y sin faltas de ortografía, estudié en varias universidades de Argentina y USA, recibiéndome y titulándome, no dejando jamás una inconclusa. De hecho trabajo de lo que estudié.

Sin embargo, a pesar de mis credenciales académicas, el disc-jockey que no puede escribir un párrafo sin la puntuación correcta o sin violar las normas ortográficas más básicas, me acusa de “Analfabeto Teologico”, bueno… tengo una maestría como mínimo y una tesis en historia de la teología por otro lado, dos diplomados en teología y otro en hebreo bíblico… pero el neo-nazi boliviano nos informa que “la autoridad del Obispo viebe (sic) de Dios, por Naturaleza del Sacramento”. El problema está que Miguel Alarcón desconoce la diferencia entre el poder de orden y el de jurisdicción, pero yo sería el ignorante, y él un semiasnarista al que pronto el mujeriego de Julio Aonzo impondrá las manos en una nueva atentada, como las que realizara en 1994 y 1995.

Este nazi-cholo o mejor aún, camba (en el III Reich no hubiera durado un minuto) ignora que el nacionalsocialismo está efectivamente condenado y que en sí mismo es una ideología perversa y anti-cristiana, totalmente neo-pagana e inspirada en el gnosticismo persa y las religiones hindúes. Aquí dejamos estos artículos para que se ilustre Miguel Alarcón:

Catolicismo y Nazismo (primera parte)

Catolicismo y Nazismo (segunda parte)

La condena de la Iglesia al nazismo: Mit Brennender Sorge

La condena de la Iglesia al Fascismo: Non abbiamo bisogno

Fantasías y herejías de los fariseos neo-nazis

El mal siempre se une: tradicionalismo, hinduísmo e Islam

El mal se está reconociendo a sí mismo

La sacerdotisa de Hitler

Quizás esto (y especialmente Non abbiamo y Mit Brennender) sirvan al merluso de Miguel como información.

Miente también Miguel Alarcón cuando cree que “refuta” algo publicado en Sursum al decir que “la potestad episcopal es de origen divino”, eso nunca se negó, de hecho lo afirmamos en reiteradas oportunidades, especialmente para aquellos que reducen a los obispos a meros vicarios del Romano Pontífice. Lo que explicamos (y quizás él no lo entendió y su esclerótico abuelo, menos) es que el poder de jurisdicción no es consecuencia de la consagración episcopal. Sostener que la consagración confiere jurisdicción ordinaria es un error presente en la eclesiología luterana temprana y mantentenida, entre otras en la iglesia danesa y la sueca. Condenada tal doctrina en Trento es levantada hoy por algunas sectas neo-conclavistas. Si él no lo sabe es su problema.

Pero el cólico mental de Miguel Alarcón no termina ahí, porque en una publicación del 18 de febrero sostiene lo siguiente:

El texto es confuso, no sólo porque está desordenado (o pésimamente construido), tampoco por una ortografía que induciría al suicidio a cualquier maestra de educación inicial, sino porque no tiene ninguna relación con la Sede Vacante. En efecto, en Hechos 20: 28 (¿no sabe como se anota una referencia bíblica el semiasnarista había Papa… o por lo menos así debería creerlo este personaje. Todavía Pedro estaba con vida, si mal no recuerdo. Además, el cholo sebáceo semiasnarista Miguel Alarcón desconoce los dos tipos de jurisdicción: la jurisdicción ordinaria (entregada por el Papa a los obispos) y la supletoria para situaciones de emergencia y que se encuentra explicada por teólogos y canonistas, y que es otorgada para situaciones excepcionales por extrema necesidad y urgencia. Quizás Miguel Alarcón podría leer esta bibliografía para comenzar:

Galliher, Daniel, Canonical Elections, Washington, Catholic Univ. of America Press, 1917.

Motry, Hubert, Diocesan Faculties According to the Code of Canon Law, Washington, Catholic Univ. of America Press, 1922.

Bliley, Nicholas, Altars According to the Code of Canon Law, Washington, Catholic Univ. of America Press, 1927.

Kearney, Raymond, The Principles of Delegation, Washington, Catholic Univ. of America Press, 1929

Connolly, Nicholas, The Canonical Erection of Parishes, Washington, Catholic Univ. of America Press, 1938.

Ryan, Gerald, Principles of Episcopal Jurisdiction, Washington, Catholic Univ. of America Press, 1939.

Riley, Lawrence, The history, nature and use of epikeia in moral theology, Washington, Catholic Univ. of America Press, 1948.

Sobre el texto de Gerald Ryan, llama la atención como el autor advierte sobre el problema de Hechos 20: 28 que, según él, sirvió de argumento a los luteranos que esbozaron así una eclesiología ligando la consagración con la jurisdicción, tal como se aprecia en Schmalkaldische Artikel. Sorprende que un prolífico teologastro como Julio Aonzo, el difunto “maestro” de religión Gary Alarcón y su estrambótico nieto ignoren algo tan básico.

También fue interesante leer como Miguel Alarcón atacó a Stehel por utilizar un nom de pluma y considerarlo sinónimo de corbardía. ¿Qué diría entonces de esta carta, publicada por el mismo Miguel Alarcón en su página, y redactada por Julio Aonzo, donde admite uno de sus tantos pseudónimos?

También hemos señalado, con Stehel las barrabasadas ornamentales del impresentable de su difunto abuelo, Gary Alarcón quien montaba una “celebración” en el changarro al que llaman capilla. Un solo ejemplo: ¿Alguien puede explicar por qué Alarcón usaba la estola por arriba de la casulla? En esta publicación, de hecho no sólo defiende a su abuelo de tal torpeza litúrgica, sino que profiere una extraña herejía, que quienes hacemos este sitio ya estamos condenados… ¿En serio? ¿No atenta eso contra la fe? ¿No implica una negación de los cánones de Trento?

Respecto al estado y calidad de los libros litúrgicos, el problema no está en que se trate de fotocopias de pésima calidad anilladas (en el mejor de los casos, la mayoría de las veces engrampadas según los mismos testigos) sino en que demuestra un total desprecio por el orden y la dignidad de la liturgia. Me explico ¿En todos los años en los que dijo ser obispo, nunca pudo cuando menos tener libros en buen estado y mediana dignidad? ¿Jamás aprendió a utilizar la estola, que por alguna razón misteriosa y que nadie puede responder, se la ponía por arriba de la casulla, generando la sorpresa de cualesquier monaguillo?

También recomendaríamos que Miguel Alarcón estudiara el trabajo de Nicholas Bliley  Altars According to the Code of Canon Law y que se sirviera de él para analizar el changarro que armó su abuelo, incluyendo las referencias al “ara”. Esto lo podría complementar con el tratado cuasi manualístico de Aloysius Feldhaus Oratories, de 1927, y por supuesto el libro de Nicholas Bliley Altars According to the Code of Canon Law. Quizás así se entere que no puede rezar misas secas sobre un altar… O por lo menos en lo que él y el senil Gary Alarcón llamaban de esa manera.

En este sentido, insistimos: la atentada de ordenación a Miguel Alarcón no sólo es grave por lo escandaloso del «candidato», un ser que carece de toda aptitud canónica e idoneidad moral para el caso, sino por provenir de un ambiente completa y absolutamente irregular y que en sus escritos y publicaciones públicas ha demostrado carecer de la más mínima preparación, no ya para las órdenes, sino para la primera comunión.

Finalmente, Miguel gusta de dar consejos (con una gorra puesta delante del «altar», dónde graba videos). Desde aquí le mandamos algunos: baja de peso, ordena tu vida privada, asume tus compromisos de estado, aprende a leer y a escribir, consíguete algunas introducciones a la fe católica, búscate un trabajo.

Autor: SursumCorda

Administrador principal de Sursum Corda

10 opiniones en “Miguel Alarcón. Futura atentada de ordenación de un hilarante camba nazi”

  1. Es muy grave que Julio Aonzo esté en las andadas nuevamente. Se ve que no perdió la costumbre de juntar impresentables, alcoholicos y desviados sexuales como lo hacía durante su temporada en Mercedes desde donde se encargó de estafar a muchas familias y vivir a muchos traumados con serios problemas mentales, laborales y sexules que se mantenian vendiendo empanadas en las estaciones del ferrocarril antes de caer en el único lugar que podía recibirlos: el «Convento».
    Ahora parece que va a ordenar al boliviano este… otro escupitajo al rostro de Jesucristo y de la Santa Iglesia.

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  2. Los que llevamos años leyendo este blog sabemos que usted puede cometer torpezas -apoyar a unos curas truchos y luego defenderlos por amistad- pero nunca usar ciertas palabras sin conocer el significado de ellas. Cuando usted lo trata de «cholo» y «camba» lo hace con manifiesta y explícita intención.

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    1. Miguel Ángel Alarcón acusa a cualquier de homosexual, insulta y carajea a todo el mundo, cree que es un teólogo y nadie puede decirle nada? No sólo es un cholo, es un delincuente de poca monta y estpa más fichado en la policía que yo en la cancha de River. Una más, este malandra dice que estuvo a punto de ir preso por luchar contra el comunismo, pero en realidad estuvo detenido por ebriedad. El abuelo lo consideró por muchos años irrecuperable y por algo se negó a ordenarlo a este impresentable.

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  3. Parece que Miguel Mendoza Alarcón tiene ahora un nuevo espacio en Facebook. Yo creo que el impresentable de Julio Aonzo lo va a «ordenar» y así irá construyendo su sectita. Qjuizás con el tiempo el bruto de Miguelito se vaya tranquilizando y tenga un «apostolado» más fructífero que el delincuente de su abuelo.

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  4. Ludovico: Es más impresentable que su abuelo. No puede hacer ningún apostolado por ignorante y mala vida. Espero que los que acudían o acuden a su ¿oratorio? abran sus ojos y se alejen de él. Recemos por su conversión. Al menos parece que encontró un trabajo digno antes de esta publicación. Saludos.

    Enrique

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